Me parece que estos voladores tienen los días contados...
Me hacen recordar el mito de Narciso; también la historia del perro que desafió su propia imagen reflejada en un espejo (y así le fue) y tantas otras cosas más...
Pobres... Quise sacarles una foto a estos gorriones desde el otro lado de la ventana -que picotean-, sin éxito.
Pero acá hay uno de ellos...
Todavía no puedo tomarle una imagen a uno de los benteveos que descaradamente come el alimento balanceado de los atómicos de mis canes... Y como si esto fuera poco, se mete a la galería; caga y canta desde ahí... jaajaj... Justo como en este preciso momento... Otro kamikaze más...
2 comentarios:
Qué lindooooooo!!!! es un benteveo real, salvo que muy chiquitito (en la foto)..¿se morfa el balanceado de tus canes? jeje, pobrecito, se ve que está cagado de hambre.
Me encantan, nunca había visto uno real:)
B'sitos
La foto capturó a un gorrión. El benteveo todavía espera por mí, jajajja. A veces anda con otro. Pero que rondan, rondan.
Nos vemos!!
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